Un reciente estudio realizado por Carolina Rodríguez, estudiante de la Universidad El Bosque, reveló cifras preocupantes sobre el consumo de suplementos dietarios entre estudiantes universitarios. La investigación, que se centró en la población de estudiantes de entre 18 y 28 años que realizaban ejercicio regularmente, arrojó resultados sorprendentes sobre la frecuencia de consumo y los riesgos asociados con el uso de estos suplementos.
Los suplementos dietarios, productos diseñados para complementar la dieta normal y proporcionar nutrientes adicionales, han ganado popularidad en el ámbito deportivo y entre los jóvenes que buscan mejorar su rendimiento físico. Sin embargo, es importante no confundirlos con una dieta saludable, ya que no pueden reemplazar los beneficios nutricionales de una alimentación equilibrada.
Según los hallazgos del estudio, de los 176 estudiantes encuestados, se descubrió que el 41,5 % consumía algún tipo de suplemento dietario como complemento del ejercicio. Este alto porcentaje refleja una tendencia preocupante hacia el uso de estos productos entre la población estudiantil. Además, se identificó que los suplementos más consumidos eran la proteína y la creatina, utilizados con el propósito de favorecer el crecimiento muscular.
El 41,5 % consumía algún tipo de suplemento dietario como complemento del ejercicio. Foto: Tomada de Pixabay
Una de las principales razones citadas por los estudiantes para el consumo de suplementos fue el deseo de ganar masa muscular. Sin embargo, también se encontraron motivaciones adicionales, como aumentar la energía, la fuerza o resistencia, y acelerar la recuperación. Estas razones muestran que los estudiantes buscan satisfacer varias necesidades al recurrir a los suplementos dietarios.
El estudio también reveló diferencias significativas en el consumo de suplementos entre hombres y mujeres. Los hombres representaron el 61,6 % de la tendencia de consumo, mientras que las mujeres representaron el 38,4 %. Estas disparidades podrían estar relacionadas con las razones de consumo y los tipos de ejercicio que cada género suele realizar.
Además de los datos sobre la frecuencia de consumo, el estudio resaltó la falta de conocimiento entre los estudiantes sobre los efectos adversos y el sistema de clasificación de los suplementos dietarios. Sólo el 53,4 % de los encuestados tenía conocimiento sobre los efectos adversos de los suplementos que consumían, y solo el 12,5 % estaba familiarizado con el sistema de clasificación basado en evidencia científica. Estos hallazgos ponen de manifiesto la necesidad de una educación más completa sobre el uso adecuado de los suplementos y los potenciales riesgos asociados.
Sólo el 53,4 % de los encuestados tenía conocimiento sobre los efectos adversos. Foto: Tomada de Pixabay
Entre los riesgos identificados se encuentran calambres, dolor de cabeza, deshidratación, problemas digestivos, hipertensión arterial y formación de cálculos renales. Es crucial entender que el consumo inadecuado de los suplementos, sin supervisión médica o sin seguir las indicaciones adecuadas, puede tener consecuencias negativas en el rendimiento físico y la salud de los estudiantes.
Ante esta preocupante realidad, se destaca la importancia de educar a los estudiantes sobre el uso responsable de los suplementos dietarios. En respuesta a estos hallazgos, la estudiante diseñó una página web que proporciona información confiable y educativa sobre el uso adecuado de los suplementos como complementos del ejercicio. La página web busca brindar a los estudiantes una fuente de información confiable y ayudarles a tomar decisiones informadas sobre su consumo.
El estudio realizado por Carolina Rodríguez en la Universidad El Bosque pone de manifiesto la necesidad de abordar adecuadamente el consumo de suplementos dietarios entre los estudiantes universitarios. Es fundamental promover una educación sólida, fomentar la consulta con profesionales de la salud y proporcionar información confiable para evitar los riesgos asociados con el uso inadecuado de estos productos.